“Quien domina los olores domina el corazón de los hombres”. La frase, perteneciente al libro “El perfume” de Patrick Süskind , resume de forma poética el poder que tienen los olores sobre los sentimientos y emociones de los seres humanos.
En ese sentido, el marketing olfativo es una estrategia que nos permite deleitar a nuestros clientes con aromas que aumentan la gratificación de su experiencia de compra. ¿Por qué es beneficioso aplicar sus principios en locales cerrados durante invierno? A continuación, algunas razones y los aromas que podemos utilizar.
Marketing olfativo y estación del año
Las personas asocian determinados olores a diferentes periodos, lo que genera distintas percepciones. El objetivo del marketing olfativo es producir sentimientos positivos mientras el cliente disfruta de nuestro servicio o producto, a partir de la asimilación de olores agradables que aumentan su satisfacción.
Ahora bien, cada época del año tiene sus propias fragancias donde la memoria olfativa se activa al reconocerlas: el verano huele a playa, la primavera tiene olor a flores frescas y el otoño a hojas y tierra húmeda.
¿Qué sucede con los aromas de invierno?
Debido al clima, en invierno es común que la gente disfrute de panoramas en lugares cerrados para protegerse del frío o la lluvia. Cines, cafeterías, tiendas, salas de realización de talleres o salones de espectáculos culturales, entre otros, son el destino favorito de aquellos que buscan recreación en época invernal.
De acuerdo con la científica olfativa Pamela Dalton, las moléculas de olor se mueven mucho más lento en esta estación, por lo que somos menos sensibles a los olores. Además, nuestros receptores olfativos “se esconden” siendo más complejo el proceso de percibir aromas.
Ante este panorama, es fundamental que escojamos con precisión los aromatizadores ambientales en invierno para crear ambientes reconfortarles, cálidos y acogedores para nuestros clientes y que los inviten a permanecer por más tiempo en nuestro negocio.
¿Qué aromas de invierno elegir?
El invierno entrega una sensación de paz, relajo y calidez de hogar. Para potenciar estas emociones podemos utilizar los siguientes olores:
- Vainilla: transmite calma y el recuerdo de momentos agradables.
- Lavanda: tiene un efecto tranquilizante y es un olor indicado para combatir la depresión.
- Chocolate: un típico olor invernal. Una taza de chocolate caliente energiza, por lo tanto, su olor es asociado a sensaciones positivas y de bienestar.
- Canela: reduce la fatiga y evoca buenos momentos del pasado.
- Café: lo asociamos a sensaciones positivas. Su olor es estimulante del ánimo, por lo tanto, olerlo provoca que la gente se sienta mejor.
- Enebro: este olor previene la fatiga y la ansiedad. El olor es fresco y amaderado.
- Manzanilla: esta fragancia es un sedante natural para las personas.
También es posible que utilices mezclas de olores como una estrategia de marketing olfativo:
- Madera de bosques: una fragancia agradable que evocará en los clientes el olor a la naturaleza en invierno.
- Flores de invierno: una mezcla de olores y flores invernales también hará sentir bien a las personas que entren a tu negocio.
- Naranja y canela: un olor fuerte, pero acogedor que remite a tardes de invierno.
Para aumentar los resultados positivos de nuestro negocio, es importante que contemos con aromatizadores ambientales de calidad y que nos transmitan sensaciones positivas según la época del año. Aprovechemos el invierno para satisfacer a nuestros clientes y aumentar la atracción de nuevos usuarios.
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